CIUDAD DE MÉXICO.- Con sólo dos abstenciones y 120 votos a favor, el pleno del Senado aprobó ayer en lo particular y en lo general el dictamen de reforma laboral apoyada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, e incluida en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Con el aval de todas las fracciones parlamentarias, se da paso a un nuevo esquema en la impartición de justicia en materia laboral, que incluye la desaparición de las Juntas de Conciliación y Arbitraje y crea los Tribunales del Poder Judicial.
También fija reglas claras para que los trabajadores elijan a sus líderes sindicales, disminuyan los tiempos de juicios individuales de conciliación, y se garantice la representatividad óptima en negociaciones colectivas.
El grupo mayoritario de Morena junto con sus aliados PES y PT rechazaron las reservas presentadas por los partidos de oposición PAN, PRI, PRD, MC y PVEM, las cuales buscaban incluir que las trabajadoras del hogar tuvieran derecho a Infonavit, suprimir la posibilidad de prorrogar la fecha de la huelga o bien que ésta sea de común acuerdo, así como adicionar el requisito de que en las boletas de votación para elegir un sindicato se incluya una opción de “no pertenecer ni ser representado por un sindicato”, y garantizar el principio de democracia sindical, evitando que un sindicato minoritario pueda estallar una huelga, entre otros.
El proyecto de decreto fue enviado al Ejecutivo para su publicación en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
Coparmex la critica
El presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Gustavo de Hoyos, indicó que los trabajadores y los patrones no tienen nada que celebrar, dado que la reforma laboral fue dictada por Estados Unidos, no por los legisladores nacionales, con lo cual se viola la soberanía parlamentaria: “No traerá crecimiento ni es un incentivo para la inversión, ojalá que honren su acuerdo y que se legisle lo que quedó pendiente”, señaló.
Lo que se aprobó…
Trasladar la facultad que tienen todas las Juntas de Conciliación y Arbitraje al Poder Judicial.
Crear el Centro de Conciliación y Registro Laboral (CCRL).
El director del centro será designado por el Senado, de una terna enviada por el Presidente de México.
Otorga a los Tribunales Colegiados de Circuito facultades para resolver conflictos de carácter laboral.
Crea la Unidad de Peritos Judiciales.
Establece el derecho a la defensoría pública en materia laboral.
La elección de los líderes sindicales será mediante el voto libre, secreto y directo.
Prevé protocolos para evitar la discriminación de género, trabajo forzoso y trabajo infantil.
Todos los contratos colectivos de trabajo existentes deberán revisarse al menos una vez durante 4 años posteriores a la entrada en vigor del decreto.
Prohíbe que los sindicatos participen en un esquema de evasión de contribuciones y puedan ejercer violencia contra sus integrantes.
Lo que queda pendiente…
No contempla temas como el outsourcing, la desaparición del salario mínimo y el garantizar ingresos suficientes para los trabajadores.
También falta que a las trabajadoras del hogar se les garanticen los mismos derechos con los que cuenta un asalariado.
Con informacion de Vanguardia