El vocero de la Arquidiócesis de León, Marco Cortés Muñiz, exhortó a la comunidad a disfrazar a los niños de santos en lugar de personajes relacionados con el Halloween, una festividad que la Iglesia considera inapropiada.
Según Cortés Muñiz, la celebración de Halloween implica «abrir ventanas o puertas a la situación del mal», lo que va en contra de los valores que promueve la fe católica.
«La Iglesia siempre ha manifestado su postura en que no podemos celebrar una fiesta en donde aparezcan máscaras de monstruos o imágenes violentas. Nosotros siempre hemos evocado más a la vida. Los niños, que son los más perjudicados, deben tener cuidado con estas tradiciones, ya que es como abrir ventanas o puertas a las situaciones del mal», comentó Cortés Muñiz.
Además, el portavoz de la Arquidiócesis sugirió que en lugar de participar en eventos que invocan a la muerte, la comunidad debería organizar caravanas a favor de la vida.
Aseguró que, al adoptar tradiciones extranjeras como Halloween, se promueve una «cultura de la muerte» en lugar de valores positivos y de respeto a la vida.
«Hay algunas caravanas que invocan mucho a la muerte, y creo que nuestra sociedad, plagada de violencia, debería unirse para hacer caravanas de vida. Debemos invitar a la gente a unirse a caravanas por la vida. Al final, cuando dejas que un niño se disfrace de algo relacionado con la muerte, estás induciendo una cultura de muerte», afirmó Cortés Muñiz.
La Arquidiócesis de León ha promovido por años una alternativa al Halloween, incentivando a los niños a participar en el Día de Todos los Santos, donde se les invita a vestirse como figuras de la fe.
«Hace años que en las parroquias hacemos el Día de Todos los Santos. Invitamos a todos los niños y adultos a vestirse de algún santo de su devoción. Los niños lo hacen con mucho gusto, y nosotros los promovemos desde la catequesis», concluyó.