Familiares de personas desaparecidas realizaron una representación simbólica de exhumaciones en las fosas comunes de Tetelcingo y Jojutla, en Morelos, en conmemoración del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas.
Durante la protesta, exigieron a la gobernadora electa, Margarita González Saravia, que impulse una estrategia eficaz para localizar a sus seres queridos.
Integrantes del Colectivo de Búsqueda de Familiares “Regresando a Casa Morelos” y del Colectivo de Víctimas y Ofendidos de Morelos se manifestaron en la entrada principal del Palacio de Gobierno, sede del Poder Ejecutivo del estado. Desde allí, denunciaron la crisis forense y, lo que consideraron, indiferencia de las autoridades de la Fiscalía de Morelos, exigiendo el derecho humano a una identidad.
En la protesta, dirigieron sus demandas a Uriel Carmona Gándara, fiscal general del Estado de Morelos, y a Samuel Nava Vázquez, coordinador de Servicios Periciales de la Fiscalía, señalando la gravedad de la crisis forense.
Desde 2016, se han exhumado más de 216 cuerpos de fosas comunes en Morelos, de los cuales solo alrededor de 20 han sido identificados. Más de 360 cuerpos inhumados en el Panteón Ministerial Jardines del Recuerdo permanecen sin identificar, sumándose a los que se acumulan en las morgues, todos bajo custodia del estado.
Los colectivos de personas desaparecidas recomendaron a las instituciones tomar medidas urgentes para enfrentar esta crisis, incluyendo la obtención, procesamiento y confrontación de perfiles genéticos de todos los cuerpos bajo custodia de la Fiscalía.
Propusieron además un enfoque multidisciplinario que incluya odontología, antropología forense y dactiloscopia, entre otros métodos de identificación.