Mike Tyson afirmó estar en forma y preparado para su combate del 15 de noviembre contra Jake Paul en una rueda de prensa conjunta que ambos boxeadores ofrecieron el domingo en Nueva York.
El combate estaba previsto inicialmente para el 20 de julio, pero se aplazó después de que Tyson, excampeón de los pesos pesados de 58 años, sufrió una úlcera que le obligó a guardar reposo.
“Iron Mike”, que tiene un récord de 50-6 con 44 nocauts, fue uno de los pesos pesados más temidos de la historia, pero no ha disputado un combate profesional desde 2005.
Cuando se le preguntó por qué había vuelto al ring tanto tiempo después de retirarse, la respuesta de Tyson fue clara: “Porque puedo. ¿Quién más puede hacerlo sino yo? Tenemos a un YouTuber luchando contra el mejor boxeador que ha existido“.
“Puede que haya estado en el ring con gente que tiene las mismas intenciones, pero la actualidad, no (…) Tan pronto como atrape a este tipo va a ser totalmente terminado, él va a correr. Va a correr como un ladrón”.
Paul, que fue abucheado y jaleado por el público, afirmó que pondría a Tyson a dormir.
“Estoy aquí para ganar 40 millones de dólares y noquear a una leyenda (…) Quiero a Mike y le respeto, pero ya no somos amigos hasta el 15 de noviembre”, dijo Paul.
Cuando se le preguntó si tenía miedo de estar en el ring con Paul, Tyson respondió sarcásticamente: “Estoy aterrorizado”.
Paul, un YouTuber convertido en boxeador de 27 años, es 31 años más joven que Tyson y tiene un récord de boxeo de 10-1.
El combate se retransmitirá en directo en todo el mundo a través de Netflix y tendrá lugar en el AT&T Stadium de Arlington, Texas, con capacidad para 80.000 espectadores y sede de los Dallas Cowboys. (Reuters).