Decenas de personas han sido detenidas en las últimas horas por su participación en acciones “criminales” y “terroristas” en Venezuela, tras las presidenciales de este 28 de julio, informó el mandatario Nicolás Maduro, quien responsabilizó de estos hechos a la oposición mayoritaria.
“Hemos sido testigos de un conjunto de eventos (…) ataques violentos, pudiera llamarse criminales, terroristas (…) se han capturado, en flagrancia directa varias decenas de estas personas”, dijo Maduro, quien fue proclamado presidente reelecto este lunes por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
El líder chavista, en el poder desde 2013, indicó que el 80 por ciento de los capturados “tienen antecedentes penales” y algunos de ellos -señaló- retornaron al país en vuelos de deportación desde Estados Unidos, pero no facilitó las identidades ni brindó más detalles.
Además, prosiguió, casi el 90 por ciento “tienen dos características: están en estado avanzado de drogadicción y están armados”.
“Llamo a la más poderosa reacción de repudio a estos hechos criminales, hechos por delincuentes de los comanditos”, expresó Maduro, en referencia a los grupos de ciudadanos relacionados con la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), el principal bloque opositor, sector al que acusó de tener un plan para “volver a desestabilizar a Venezuela”.
Entre las acciones denunciadas por Maduro, hubo ataques a “un centenar” de los más de 15 mil centros de votación habilitados para los comicios, destrucción de “materiales electorales”, quema de “alcaldías” y agresiones a efectivos de la Fuerza Armada Nacional y agentes de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), denuncias que las autoridades no hicieron el domingo, día de los comicios, cuando aseguraron que la jornada había transcurrido sin incidentes.
De acuerdo con el Gobierno, al menos 23 militares han resultado heridos, “algunos con armas de fuego, víctimas de los actos violentos” de este lunes, cuando miles de venezolanos salieron a las calles de Caracas y varias regiones del país a protestar, acciones que, en varias de ellas, hubo represión por parte de militares y policías.
La agencia EFE constató que efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, Policía militarizada) y de la Policía Nacional Bolivariana usaron gases lacrimógenos y dispararon perdigones contra los manifestantes que protestaban pacíficamente en una zona de Caracas hasta la llegada de los efectivos, y detuvieron a una veintena de ellos.
Durante la jornada, al menos cuatro estatuas del fallecido mandatario Hugo Chávez (1999-2013) fueron derribadas por manifestantes, en rechazo a los resultados oficiales de las elecciones, facilitados por el Consejo Nacional Electoral (CNE), según los cuales Maduro obtuvo el 51.2 por ciento de los votos y el candidato de la PUD, Edmundo González Urrutia, el 44.2 por ciento, datos ampliamente cuestionados por la coalición opositora y buena parte de la comunidad internacional.