Fuente/INFORMADOR
En medios internacionales y redes sociales las imágenes de supuestos cadáveres de personas que murieron por COVID-19 incendiándose en las calles de Guayaquil, Ecuador, no han dejado de fluir. Sin embargo, según señaló el periodista del mismo lugar, Andrés Donoso, son falsas.
«Lo que hicieron familiares (de personas fallecidas) fue quemar llantas y en algún caso un ataúd para que las autoridades fueran y recogieran los cadáveres (de sus casas), los cuales tenían hasta 4 días», indicó.
La psicosis en el lugar y en el mundo ha aumentado por la incertidumbre de las cifras y la razón de muerte de cada persona.
«La gente se enfermaba, a lo mejor sin todos los síntomas, los mandaban a sus casas y fallecían por alguna otra cosa. Es altamente probable que por COVID-19, aunque no saben porque no hay pruebas. Deberían contarlos como en China: si tiene síntomas del virus y fallecen se cuentan como fallecimientos por COVID», reportó el doctor privado, también de Ecuador, Alberto Cárdenas.
Donoso detalló que hay gente que se desfallece en la calle y muere, así como cadáveres que arrojan en el centro de la ciudad, en basureros y afuera de las mismas casas por el colapso en funerarias y morgues. Pero no hay certidumbre de la razón.
«Hay familias que los sacan a los portales para que no sean focos de contaminación, o quienes han llegado graves a los hospitales y fallecen ahí. También una campaña de desinformación por el anterior gobierno para crear pánico, pero sí ha habido más muertos de los reportados», agregó el doctor.
Detalló que antes de que la crisis por el virus azotara Guayaquil, en esta había unos 40 muertos a la semana -por enfermedades, causas naturales, entre otras-, pero ahora rebasan los 100.
Esto, aunado a lo que consideró una lenta respuesta por parte del gobierno provocó que se rebasaran estas áreas.
Por ello, las autoridades ya buscan una solución para disponer de los cuerpos. De acuerdo con Cárdenas, la ONG «Junta de Beneficencia de Guayaquil» donó un terreno para poner ahí los cadáveres, aunque aún no se sabe que disposición habrá (fosas comunes, individuales o crematorios).