Silvia Amairani, la joven de 19 años, que este miércoles denunció que un hombre y una mujer le habían robado a su hija tras provocarle el parto, fingió su embarazo, informaron la Fiscalía de Nuevo León.

Se precisó que, de acuerdo a un estudio y dictamen médico legista, no hay evidencia de embarazo.

«La Fiscalía General de Justicia del Estado de Nuevo León informa que de acuerdo a un estudio y dictamen médico legista no existe evidencia de un embarazo de la persona identificada como Silvia de 19 años de edad, misma que reportó el día de hoy el supuesto secuestro de una bebé en la Col. Concordia de Gral. Escobedo, N.L y que derivó en la activación de una Alerta Amber», se lee en el reporte emitido por la Fiscalía de Nuevo León.

De acuerdo a los primeros informes, un hombre y una mujer de origen extranjero habrían llegado a la vivienda de Silvia Amairani y, posteriormente, se habrían aprovechado de que ella estaba dormida para inyectarle una sustancia, sedarla e inducirla a la labor de parto.

Incluso, se difundió un video en el que Silvia Amairani aparece acostada en una cama y bajo una especie de shock y confusión comenzó a relatar que ella estaba dormida cuando el hombre y la mujer habían entrado a su casa.

Tras darse a conocer esta noticia se inició con un despliegue de seguridad en el municipio de Escobedo y se procedió a activar la alerta Amber para dar con el paradero de esta bebé.

Durante el transcurso de la tarde, las autoridades continuaron con las labores de búsqueda correspondiente y, como parte de ello, se autorizó el cateo de la casa donde Silvia Amairani vive en compañía de su pareja, un joven de 22 años.

En tanto, la joven fue trasladada al Hospital Universitario, donde el último reporte médico indica que es reportada como estable.

Alrededor de las 20:00 horas, la búsqueda por la supuesta bebé robada en el municipio de Escobedo sigue mediante un operativo de seguridad por parte de la policía de Monterrey, el cual se amplió a la Central de Autobuses, a su vez, se colocaron filtros de revisión en distintas avenidas de la ciudad.

Tras confirmarse que no había ningún embarazo de por medio, la Fiscalía de Nuevo León procedió a desactivar la alerta Amber y, por ende, se finalizaron las labores de búsqueda.