Matamoros, Tamaulipas.- Hilda y José, una joven pareja con cuatro hijos, todos menores de edad, tenían la fe y la esperanza de una mejor vida en la cita que les habían otorgado por parte del gobierno de Estados Unidos para tramitar su asilo humanitario, sin embargo, se llevaron una desilusión pues no les permitieron el paso tras la cancelación ordenada por Donald Trump.
La tarde de este miércoles los hondureños que tenían programada su entrada a EUA desde hace un mes y medio, fue regresada por la autoridad del Puente Viejo Internacional de Matamoros, Tamaulipas, después de informarles que no tendrían acceso por decreto.
Conscientes de que estos trámites migratorios se detuvieron, decidieron no perder la fe y constatar por ellos mismos, que efectivamente su sueño americano estaba en riesgo de desvanecerse.
La familia arribó minutos antes de las dos de la tarde al acceso del Puente Viejo, los pequeños, los más inocentes respecto al difícil momento que enfrentan en su recorrido por el cruce internacional, corrían y jugaban, colgándose de la reja que deja ver el río Bravo, mientras sus padres caminaban con gran incertidumbre, pero sin perder la ilusión de que su cita siguiera vigente.
Al llegar al límite fronterizo, los atendió un oficial de CBP, que les confirmó que las citas se cancelaron.
Las miradas de Hilda y José se llenaron de decepción, quedaron en silencio por algunos segundos, tomaron de las manos a sus hijos y caminaron de regreso.
“Habían venido muchos y ellos nos habían dicho que los estaban regresando, pero nosotros queríamos comprobarlo en persona”, señaló Hilda.
Y agregó: “teníamos la ilusión de llegar a Estados Unidos”.
Los jóvenes padres expresaron su desilusión pues aseguran hicieron un gran sacrificio para llegar a la frontera.
“Tenía la esperanza de la cita pero las están cancelando. Tenía la esperanza de sacar a mi familia adelante”, expresó José.
Y Hilda añadió: “triste porque estamos aquí, y sin dinero”.
Esta familia de hondureña, es tan solo una de las decenas de familias migrantes centroamericanas han sido regresamos en su intento por hacer valida sus citas.
Y en muchos de los casos ya no cuentan con el recurso monetario para regresar a sus países de origen.
En los alrededores del puente internacional se puede detectar a parejas, familias y grupos de migrantes en la misma situación, con toda su fe en una cita, que hoy ya no existe.
Por EnlaceMx