Morena y sus aliados en el Congreso de Tamaulipas mayoritearon para lograr la aprobación de la reforma judicial en el estado, convirtiéndose en la primer entidad del país que llevará a elección a la totalidad de jueces, juezas y magistrados en Tamaulipas.
Aunque el debate duró una hora y media, la opocisión no logró detener la reforma que fue aprobada con 26 votos a favor, para renovará el Poder Judicial en el estado el domingo 1 de junio del 2025, de manera simultánea con las elecciones que en el mismo sentido se realizarán en el ámbito federal.
El diputado Isidro Vargas Fernández, dijo que la reforma se nutrió de los resultados de la consulta pública, en el que se incorporaron propuestas de especialistas, instituciones educativas y la ciudadanía, tras un diálogo que permitió realizar ajustes clave al proyecto.
En la reforma se contemplan cambios como la creación de dos nuevos órganos que sustituirán al Consejo de la Judicatura: el Tribunal de Disciplina Judicial, encargado de investigar y sancionar faltas en el desempeño de juezas, jueces, magistradas y magistrados; y el Órgano de Administración Judicial, que gestionará las operaciones internas del Poder Judicial.
En el proceso de análisis, dijo que se garantizó la protección de los derechos laborales de los trabajadores judiciales y se establecieron lineamientos claros para que la transición al nuevo modelo orgánico no afecte sus condiciones laborales ni su estabilidad.
Entre las modificaciones derivadas de los foros destaca que la remoción de jueces será exclusiva del Tribunal de Disciplina Judicial, eliminando esta facultad del Congreso, además, se realizaron ajustes para armonizar la reforma con la Constitución Federal y se integraron jueces en proceso de ratificación en la elección de 2024-2025.
La primera a subir a tribuna fue la priista Mercedes del Carmen Guillén Vicente quien dijo que el Poder Judicial por su naturaleza debe ser imparcial, “requiere de autonomía e independencia y no debe ser expuesto a la corrupción de la política”.
Y les dijo a Morena, PT y Partido Verde: “esgrimir como argumento que la mayoría del pueblo les dio el derecho de cambiar todo, es absolutamente falso”, apuntando que la impartición de la justicia, solo es un eslabón más de lo que debiera reformarse.
“Elegir a los jueces, politizará el Poder Judicial y será incapaz de controlar el abuso del poder, o como dijo alguien, es como permitir a los aficionados al fútbol, elegir a los árbitros”, lo que el morenista Isidro Vargas atajó señalando que no hay violación a los derechos humanos.
La panista María del Rosario González Flores señaló que la reforma amenaza con socavar los principios de la justicia e independencia institucional, ya que si bien en el discurso se busca fortalecer el sistema de justicia, combatir el nepotismo y la rendición de cuentas.
“En la realidad, solo se está abriendo la puerta a influencias políticas en la elección de jueces y pone en riesgo la imparcialidad del sistema judicial; que con todos sus defectos y desafíos, es uno de los pilares fundamentales que protege a la ciudadanía de anusos de poder”.
En tribuna, la legisladora de Movimiento Ciudadano, Mayra Benavides Villafranca, aseguró que la elección de jueces y magistrados, “prioriza la popularidad sobre la capacidad técnica, comprometiendo gravemente la imparcialidad, peor aún, la autonomía que debe tener el Poder Judicial de la Federación”.