En redes sociales se viralizó un video que refleja una realidad muy dolorosa cuando se utilizan a los niños para cometer delitos y las imágenes captadas por las cámaras de seguridad al exterior de un negocio mostraron las consecuencias de estos actos en el que una madre presuntamente utilizó a su hijo menor, de 5 años, para extraer unos objetos de un comercio.
De acuerdo con la cuenta Actualidad Viral, en la plataforma social X, la mujer envió a su hijo pequeño a robar algunos juguetes que estaban en exhibición y cuando fue descubierto y confrontado, la madre agredió a la propietaria.
Los hechos ocurrieron en la ciudad Ramos Mejía, en Argentina, y el acto inocente pero intencionado del nene desató una cadena de eventos cargados de tensión, donde el robo dejó de ser el problema principal para convertirse en una pelea entre la dueña del comercio y la madre del niño, la cual quedó grabada por las cámaras de seguridad.
De acuerdo con el relato de la dueña del negocio, su hija notó que un niño entró al local, agarró algunos objetos y salió. Cansada por la frecuencia de los robos, la mujer fue tras el pequeño para recuperar la mercancía. Sin embargo, esa acción desencadenó una reacción violenta de la madre del menor, que lo esperaba afuera.
Al ver que su hijo fue confrontado por el robo, la madre reaccionó con furia, por lo que llevó al niño de vuelta a la entrada del negocio y con insultos y amenazas, increpó a los dueños del local. Incluso la mujer pateó la puerta del lugar y su propio hijo imitó el comportamiento violento, pateando también la entrada.
La dueña del comercio relató que al salir la hija para hablar con la madre del menor, ésta la tomó del cabelló y la comenzó a golpear hasta que un cliente intervino y pudo separar a ambas mujeres. Cuando todo terminó, la madre del niño se alejó, lanzando amenazas desde lejos de que regresaría para acuchillarlas.
Informó que se presentó una denuncia ante las autoridades. La dueña del local añadió que este tipo de robos son muy comunes en la zona por lo que vecinos y comerciantes están hartos.
