Cada vez que las mujeres comienzan a brillar en espacios tradicionalmente dominados por hombres, las violencias hacia ellas se ven exponenciadas. Un triste ejemplo de ello es la streamer mexicana Samantha Rivera, mejor conocida como «Rivers«, pues a través de su cuenta de X (antes Twitter) reveló que ha sido víctima de cientos de comentarios de odio y amenazas de muerte.
Estos aterradores mensajes comenzaron a ser aún más preocupantes después de haber ganado el premio a la «Streamer del Año» en los eSports Awards, lo que confirma que la violencia de género se encuentra muy presente en la comunidad gamer internacional y ha encendido una profunda conversación sobre la violencia machista en las plataformas digitales, especialmente en una industria dominada históricamente por hombres.
Rivers, originaria de Monterrey, es una figura destacada en la escena del streaming en Latinoamérica y es que a lo largo de su carrera, ha representado a México en eventos internacionales como la «King’s League» y «La Velada del Año«, destacándose por su carisma y talento. Sin embargo, su reciente triunfo ha desencadenado una ola de odio en su contra, lo que ella misma ha descrito como incomprensible debido a que en todo momento se ha mantenido fuera de polémicas.
Fue a través de sus redes sociales en donde la streamer expresó su confusión y temor ante la magnitud del acoso que ha estado recibiendo. «Los comentarios, mensajes en todas mis redes de odio y acoso y hasta amenazas de muerte que llevo recibiendo desde hace días por otras comunidades no tiene sentido», señaló la streamer, visiblemente afectada.
Esta declaración pone en evidencia una problemática mucho más amplia y preocupante: la normalización de la violencia digital, especialmente dirigida hacia las mujeres que logran destacar en espacios predominantemente masculinos. De la misma forma, la streamer también hizo un llamado a la reflexión, no solo a los individuos que participaron en el acoso, sino también a las comunidades que permiten que este tipo de comportamientos se normalicen.
«A la gente con comunidad tan grande que no les importa decir cosas malas acerca de una persona sin saber nada de ella, espero que se den cuenta de la repercusión que tienen», afirmó, subrayando la importancia de la responsabilidad colectiva en la creación de un ambiente más seguro y respetuoso en línea.