CDMX.-Hace algunas horas por medio de redes sociales el experto en espectáculos Luis Magaña compartió una entrevista que le hizo a Raúl Soto mejor conocido como Peraki Soto quien es influencer y planeador de bodas en donde denunció haber sido víctima de abuso por parte de un famoso periodista.
En dicha entrevista la cual tiene una duración de 29 minutos con 54 segundos Peraki Soto revela cómo es que fue víctima de abuso por parte del periodista de espectáculos Juan José Origel cuando tenía tan solo 17 años de edad.
De acuerdo con el propio Peraki Soto, tuvo una infancia muy difícil y precaria, por lo que fue adoptado por la familia de un famoso actor de quien no quiso revelar el nombre pues asegura que no desea verlo involucrado en esto, pese a que tuvo el apoyo de sus padres adoptivos el ahora influencer revela que se juntó con malas compañías quienes lo adentraron al mundo de las drogas.
Debido a estas malas compañías Raúl Soto comenzó a tener problemas por lo que su familia adoptiva decidió ya no seguir apoyándolo, por lo que él buscó la manera de seguir consumiendo sustancias adictivas y esto lo llevó a trabajar para una red de prostitución infantil.
Peraki Soto asegura que fue un hombre de nombre Alejandro Serrano originario del Puerto de Veracruz quien lo metió a esta red que se dedicaba a prostituir a jóvenes con personalidades famosas y de poder, no solo en aquel Estado sino en toda la República Mexicana.
Fue así como una vez lo llevaron al entonces Distrito Federal a que diera un servicio en la Colonia Roma para un famoso periodista, se trataba de Juan José Origel quien recibió este servicio como un regalo de cumpleaños según el propio Peraki Soto, además el ahora influencer y planeador de bodas relató que sí hubo un encuentro sexual con el personaje antes mencionado.
Pese a que ha querido denunciar legalmente, Peraki Soto revela que le han dicho que esto no procede, por lo que ahora solo lo habla en redes sociales con la esperanza que se haga conciencia para quienes contratan este tipo de servicios sexuales con personas menores de edad.
FUENTE: EL HERALDO DE MÉXICO