CDMX.-En los últimos meses, ante el alza de los precios de los insumos para la producción de tortillas, algunos fabricantes comenzaron a buscar la manera de reducir los costos y mantener sus ventas. 

Aunque no todos lo hicieron de la mejor manera e incluso comenzaron a fabricar tortillas «pirata». 

De acuerdo con Blanca Mejía, presidenta de la Red de Maíz, algunos tortilleros dejaron el comercio formal para abaratar costos y con ello mantener ventas, a costa de reducir la calidad del producto y echarle más cal o reciclar tortillas viejas, dejar de pagar salarios e incluso pasar a la informalidad.

A ello se suma otro de los riesgos para el mercado de tortillas «pirata» que ha identificado esa agrupación, que es el uso de productos de origen ilícito, desde el gas y la maquinaria hasta las propias harinas.

“Los clientes están comprando tortilla ‘pirata’; es esta tortilla que no se sabe en dónde se produce, por negocios que para abaratar costos ya no pagan seguridad social, no cuentan con capacitación en la normatividad de salud”, advirtió en entrevista para Grupo Fórmula.

A ello se suman las tortillerías clandestinas, que de acuerdo con Rubén Montalvo Morales, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Producción de Masa y Tortillas, es un fenómeno actual ante el que hay que tener mucho cuidado, sobre todo por la dudosa higiene con que se fabrica el alimento, presente en la mayoría de las mesas de las familias mexicanas, comentó en entrevista con Grupo Fórmula.

Y si bien no es fácil identificar las tortillas «pirata», es posible que estas se ofrezcan a precios mucho más bajo de los actuales 20 pesos que cuesta un kilo en la mayoría de comercios, como tortillas frías, es decir, empacadas previamente y que no están recién salidas de la máquina, en establecimientos como tiendas y misceláneas, recauderías, verdulerías, pollerías y hasta farmacias.

La producción irregular de tortillas implica que se desconozcan las condiciones de higiene y salubridad para el manejo, almacenamiento y proceso de los insumos para elaborar las tortillas.

En México, se cuenta con la NOM-251-SSA1-2009, que establece las condiciones de higiene para la producción de alimentos, entre las cuales se advierte que las tortillerías deben vigilar, entre otras cosas, que el grano que reciban esté libre de moho, infestaciones de insectos y que tenga el color característico para usarlo en la fabricación de tortillas.

Además, hay que considerar que las tortillas, de acuerdo con la Fundación UNAM, contienen minerales como calcio, magnesio, fósforo, potasio, niacina y vitaminas A, C, D, E, B1 y B2. 

La combinación de vitaminas C y D con el calcio ayuda a fijarlo en huesos, según explicó la académica Berenice Montaño Gómez, de esa universidad.

Por ello entre los riesgos de consumir tortillas pirata se encuentran: 

• La posibilidad de contraer enfermedades gastrointestinales ante la falta de claridad en las condiciones en que se fabricaron y de los insumos que se utilizaron. 
• La posible poca o nula obtención de los nutrientes que suelen contener las tortillas.
• El consumo de sustancias no controladas o de harinas distintas a las de maíz o con exceso de cal para su producción y abaratar costos de las tortillas «pirata».

FUENTE: RADIO FÓRMULA