Matamoros, Tamaulipas.- La familia del estudiante de primer grado del colegio Rafael Tejada Puente, que este día denunció maltrató luego de que la maestra Carmen Míreles le expresara al menor que limpiara su vomito con la lengua, ya pidió asesoría legal y plantea formular una denuncia por el daño sicológico que sufrió en su primer día de clases.
En entrevista para EnlaceMx, la mamá del pequeño, Jaqueline Trejo, aseguró que el caso lo ventilaron en las redes sociales para advertir a los padres de familia el riesgo que corren sus hijos, ya que también se han develado otros casos de acoso escolar suscitados en esas institución, ubicada en la calle 12 con Juventino Rosas.
“Expusimos el caso porque a lo mejor hay muchos niños que están pasando una situación así y por miedo no dicen”, señaló.
Añadió que ya se ha contactado con un conocido que sabe de leyes y definirán si emprenderán un proceso legal contra quien resulte responsable del acto cometido contra el alumno que a la postre originó que se rehusara a regresar a las actividades en ese lugar.
Madre atenta
La señora comentó que el día del incidente su hijo llegó desencajado, algo que no es normal, ya que por lo regular es inquieto, pero respetuosos porque así se le ha inculcado en el hogar.
“La maestra quería que yo limpiara mi vomito con la lengua”, fueron las palabras que Jaqueline escuchó la tarde de ayer por parte de su vástago y que la impulsaron a acudir a la escuela a solicitar una explicación.
No la obtuvo, contrario a eso, solo se ganó la agresividad de la docente, quien además le dijo que su hijo era un “monstruo” y sería un “fracasado”.
En un principio la imputada negó la versión, pero después se tornó áspera y perdió la educación, a pesar de señalar que pertenecía a un grupo de damas notarias.
Mencionó que pidió se le regresara el dinero de los libros que adquirió, pero al final, después de la hostilidad de la profesora, le quedaron a deber 500 pesos.
Niño está bien
Jaqueline contó a este medio que su hijo se encuentra bien después de esa amenaza he frase que recibió e incluso tienen ganas de regresar a la escuela, pero no a ese colegio.
Indicó que estarán vigilando su comportamiento después del lo ocurrido y ya será su decisión si lo canalizan con un profesional para que lo ayude.
“Vamos a ver cómo responde en estos días, el niño me decía que sí quería ir a la escuela, pero esa no”, enunció.
Resaltó que la unión familiar que han preservado será un apoyo para superar este amargo episodio.
Por EnlaceMx